viernes, 30 de marzo de 2012

Hugo


Georges Méliés: If you've ever wondered where your dreams come from, you look around... this is where they're made


La película más reciente del afamado director  Martin Scorsese cuenta la historia de Hugo, un pequeño niño huérfano que vive escondido entre los relojes de una estación de trenes en Francia, Hugo se siente comprometido con terminar la tarea que realizaba su padre antes de morir, reparar un viejo autómata diseñado para el espectáculo, mientras Georges, un viejo vendedor de juguetes con una pequeña tienda en la estación, no deja de escudriñar al joven.

Las actuaciones, aunque no fueron nominadas, son sobresalientes, conjugan en general muy bien la ambigüedad entre las responsabilidades y el deber con las emociones humanas y la lucha eterna entre estos sentimientos que todos tenemos todo el tiempo, la disyuntiva entre ser humanos o ser funcionales, así como la necesidad de realizar bien un trabajo.

Técnicamente la película es perfecta, o se acerca bastante,  fue filmada en formato 3D lo que ayudó al director a ampliar los ejes de narrativa de 2 a 3, y simplemente se nota en la película cuando los emplazamientos destacan el mundo que se abre frente a los ojos de Hugo, con incursiones de personalidades como Salvador Dalí o James Joyce, así como extraordinarias escenografías de la época, todo mientras el joven permanece escondido en fondos tras metales y muros.

La aplicación de esta nueva narrativa es de considerar tomando en cuenta que hasta ahora el 3D solo se había visto aplicado como complemento o como un bonito adorno de las grandes producciones, sin embargo como lo menciono arriba Scorsese ha encontrado una nueva línea de narrativa en cuanto a la profundidad, herramienta que seguramente se irá puliendo con forme se diseñen las producciones, o eso esperemos.

Pero, aunque así pareciese, la Técnica no es el punto fuerte de esta producción, es la nostalgia y las claras intenciones por construir un homenaje a la industria en base al mismo medio de expresión lo que convierte al filme en una clásica instantánea.

Al igual que películas como Cinema Paradiso de 1988, que cuentan historias en base o con ambientación  de situaciones construidas con la historia recorrida por el celuloide, se les agrega un extra de emoción que por lo general no falla, en el que la gente se siente identificada de inmediato con el reconocimiento de otras épocas, sin embargo esta mágica carta que solo el cine sabe reproducir no es fácil de utilizar, porque hay que saber tanto como presentar los elementos, como cómo llevar al espectador a través de sus recuerdos, en ambas películas tanto la mencionada como en La invención de Hugo Cabret  esto esta manejado de muy buena forma.

La invención de Hugo Cabret es una de esas pocas producciones en las que se le invierte mucho dinero al diseño y a la narrativa, donde se busca hacer llamativa la imagen y a la vez se procura armar en base a buenas participaciones actorales una trama entretenida y a pesar de todo esto ningún elemento asoma por encima del mensaje lo que a mi parecer es el elemento más importante de una producción de calidad.

A final de cuentas  La invención de Hugo Cabret es una película diseñada para homenajear, revolucionar  y, principalmente, para permitir soñar al espectador, es un filme que desde su construcción se diseñó con la idea de presentar a la producción como un claro ejemplo de que la industria cinematográfica es la fabrica de sueños por excelencia.


Por Daniel

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